El sistema de distribución de energía eléctrica debe poder abastecer toda la demanda de energía eléctrica para los diferentes niveles de carga y mejorar la redundancia del sistema es una mejora importante para mejorar la confiabilidad.
El diseño de la infraestructura de suministro y distribución de energía eléctrica está concebido para minimizar el impacto por contingencias y cumplir con los estándares del servicio (calidad y continuidad) y renovar los elementos del sistema de suministro y distribución que tengan en cuenta el riesgo de impacto en la continuidad del servicio. De esta manera, existen criterios de diseño de redes de distribución que consideran la calidad del suministro y distribución de energía eléctrica, ya que la planificación y operación en infraestructura adoptan criterios para prevenir riesgo de interrupción del servicio y variaciones no intencionales de calidad (voltaje, frecuencia, capacidad y otros). En la planificación, las empresas eléctricas deben utilizar el criterio denominado N-1, es decir, se debe mantener el suministro eléctrico incluso si falla 1 equipo en el sistema, para algunos clientes con alta criticidad, es posible utilizar criterios N-2. . En la operación, con tecnologías de comunicación y medición, la reconfiguración y un esquema de isla de DG son métodos posibles que pueden ayudar a implementar confiabilidad diferenciada.
Para nuevos activos, existen protocolos para asegurar la calidad de la energía eléctrica al integrar nueva infraestructura y el uso de las posibilidades que ofrecen los medidores inteligentes, sin aumento excesivo de precio para los clientes; como las capacidades de los medidores inteligentes en la medida y los beneficios posibles, pero también para asegurar que el monitoreo de la calidad de la tensión a través de medidores inteligentes no resulte en un aumento excesivo en el precio de los medidores o en las tarifas para los usuarios de la red. Y para estas nuevas obras e interrupciones planificadas, es importante que los clientes sean notificados con anticipación, para minimizar el impacto de los cortes de energía.
El sistema de distribución de energía eléctrica debe poder abastecer toda la demanda de energía eléctrica para los diferentes niveles de carga y mejorar la redundancia del sistema es una mejora importante para mejorar la confiabilidad.